Descripción
Pobladores de la zona del Calvario y Cotapachi, municipio de Quillacollo, bloquearon, ayer en la mañana, la avenida Blanco Galindo, a la altura del kilómetro 12, pidiendo la ampliación de la mancha urbana.
El dirigente de los movilizados, Cirilo Herbas, explicó que la medida de presión era necesaria porque hace varias semanas se firmó un acta de entendimiento con autoridades municipales para que se atienda su demanda de ampliación de la mancha urbana, pero hasta la fecha no se avanzó “nada” en el trámite.
La movilización de las juntas vecinales de Quillacollo no fue aislada, sino coordinada con similares de Vinto y Cercado, todas pidiendo la ampliación de la mancha urbana. Esta petición se hace antes de que se venza el plazo para la regularización de las propiedades urbanas según lo previsto en la Ley 247, aprobada en 2012 con el fin de sanear las viviendas que hayan sido adquiridas de “buena fe” y que estén dentro del radio urbano.
El bloqueo de la carretera al occidente fue organizado por la Coordinadora de Juntas Vecinales de Vinto y de Quillacollo. Más de 200 personas impidieron el paso de vehículos a la altura del río Huayculi en el kilómetro 12 de Quillacollo y en Tacata en el kilómetro 15 de Vinto.
Después de seis horas de bloqueo de la ruta al occidente, la Coordinadora de Juntas Vecinales de Vinto y Quillacollo firmó un acuerdo para suspender sus medidas de presión.
En el acta de entendimiento, suscrita entre los vecinos y la Alcaldía de Quillacollo, ayer se estableció que “la empresa constructora Marale (que realiza una consultoría sobre la mancha urbana) presentará todas las observaciones subsanadas y adjuntará las correcciones necesarias, como informe preliminar para su revisión y aprobación de propuesta de ampliación de la mancha urbana y el sábado se realizará una reunión en el Salón Rojo de la Alcaldía de Quillacollo”.
Policías acudieron al lugar a pedir el desbloqueo de las dos vías de la carretera interdepartamental, que fue despejada después de mediodía.
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